El día de hoy, leyendo un libro de María Montessori encontré estas palabras que, si las leen con el corazón, encontrarán respuestas:
"La preparación interior del maestro no consiste en buscar la propia perfección al modo como lo hacen los religiosos, no es convertirse en seres perfectos exentos de toda debilidad; antes bien, se trata de reconocer y aprender de los propios defectos, que son los que nos permitirán comprender al niño, pues el guía Montessori debe dejar que él nos enseñe y nos guíe. Todo guía Montessori debe educarse, aprender de sí mismo y del niño y dejarse guiar por la naturaleza de éste si verdaderamente quiere educar."
Se trata de aprender a observar, entender y leer al niño y lo que nos muestra con su comportamiento: ¿por qué está pataleta? ¿por qué despierta está molestia en mí? ¿qué necesita realmente mi hijo y no he logrado entender? Reconocer nuestros defectos para entender al otro.
Observación y humildad, son dos palabras claves a la hora de querer acompañar a nuestros niños.
Un abrazo a todos.
Sylvia Vásquez Segovia
Mundo Montessori Jardín Infantil
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